Se equivoca Marías aunque sea por última vez y ya no vaya a volver a equivocarse nunca más. Se equivoca Marías al morirse tan antes de su tiempo, con setenta años que no son tantos como así lo fueron hace algún tiempo, y llevado, en última instancia, por una enfermedad pandémica ya en horas bajas; de la que es presumible que estuviera vacunado y aun así no fue suficiente y algo se torció y hubo un tiempo de coma clínico y luego una muerte de cuyos detalles poco se sabe ni haya de saberse nunca; no al menos de forma pública y conspicua; sí sabrán los allegados, los cercanos, los […]