July 6, 2008
Venga, va. Que ya aburre. A ver si perdemos en algo de una vez que esto empieza a ser un coñazo.
Enhorabuena a los premiados.
Venga, va. Que ya aburre. A ver si perdemos en algo de una vez que esto empieza a ser un coñazo.
Enhorabuena a los premiados.
Con la final de Roland Garros todavía en la retina y con la de ayer de Wimbledon, me asalta una duda: ¿ha mejorado tanto nuestro Rafa Nadal en este último año, o ha sido el suizo el que ha bajado el nivel?
La respuesta, como siempre, creo que incluye un poco de ambas. A Rafa le veo mucho más completo en su juego, mientras que empiezo a ver síntomas de hastío en Roger Federer cada vez que se cruza con el “iron man” español. Hasta cuando es el suizo el que gana, da la sensación de que jugar contra Nadal le deja tan agotado física y mentalmente, que ni siquiera disfruta la victoria.
En cualquier caso, no se puede dejar pasar la oportunidad de resaltar la gran deportividad de estos dos grandes jugadores. El suizo sólo tuvo palabras de enhorabuena para Nadal durante la entrega de premios, y este, a su vez, se volvió a deshacer en elogios para el número 1 del mundo al que calificó, en vivo y en directo, como “best player of the history”.
Eso fue lo que hizo Nadal.
No se pavoneó por toda la pista levantandole un dedito al 5 veces campeón de Wimbledon.
Eso se llama respeto.
¡Vaya! No deja de sorprender tus cambios repentinos e inexplicables de opinión. Ahora resulta que defiendes a Rafa, la otrora joven promesa del tenis español. Me alegra de que entres en razón (si bien nunca se puede estar seguro de cuánto te durará) y espero que modifiques de igual modo tu opinión sobre el campeón español de F1.
Curiosamente unas celebraciones te parecen bien y otras no. Muy coherente todo.
En cuanto al resto. Yo me decanto por una mejora sustancial del juego del español, que se ha demostrado a lo largo del campeonato y que sus rivales también han sabido ver. Lo cual no quita que para Federer jugar contra Nadal es un suplicio y cada vez lo es más, especialmente después del varapalo de Roland Garros, y, previsiblemente, todavía lo será más después de esto.
La ventaja de Rafa es que no desfallece. Estuvo casi todo el último set a remolque de Federer (no por peor juego sino por la mera circunstancia de que era este último el que empezó sirviendo) con el desgaste psicológico que eso supone. Y sin embargo, la erosión mental se decantó hacia el otro lado al ver que era imposible hacer mella en el español. Sólo un servicio consiguió romperle Federer, frente a los 3 de Nadal.
El hermano F&T queda instado desde este momento a tirar de archivo y sacar un post-comment firmado por mí donde critique al gran jugador español. Y mientras él se entretiene cerrando su propia boca, yo hablaré de tenis, de celebraciones y de respeto.
¡Qué feo habría quedado ver a Nadal levantandole un dedito a Federer después de ganar el torneo!. ¡Qué poco elegante habría sido!. Lo queramos o no, el comportamiento de nuestros compatriotas más allá de nuestras fronteras sienta las bases para la creación de estereotipos, y si los nuestros demuestran una actitud poco respetuosa en escaparates de gran envergadura, obvia decirse la imagen que tendrán de los españoles en el extranjero.
Así pues. Sobresaliente Nadal y suspenso Alonso.
Por lo demás, ya he comentado alguna vez que considero al tenis como el deporte más psicológico que hay, por encima incluso del tiro con arco o la petanca, de modo que considero digno de admiración la fortaleza psicológica tanto de Federer como de Nadal, al no dar el partido por perdido ni el uno ni el otro. Ni aquel mientras se vio 2 sets por debajo a la hora de partido, ni este al ver cómo se desvanecía su ventaja en un torneo tan desfavorable para él como beneficioso para su rival.
¡Enhorabuena a estos dos grandísimos deportistas!