Me gustaría poner aquí un trozo de los editoriales de los dos periódicos mayoritarios en españa, El Mundo y El País. No obstante no puedo hacerlo ya que El Mundo no da acceso a sus editoriales a través de Internet. Si consigo su editorial en papel lo pondré.

En él nos dice que a pesar de que haya gente (ellos no) que pueda ver en este atentado una prueba de que no se ha cedido desde el gobierno ante ETA, se puede entender también desde el punto de vista de que negociar con los terroristas es un error. En esto incide y aprovecha para pedir que se relance el pacto antiterrorista, tesis que, como todos sabemos, abandera el PP. Ahí queda eso. Cada cual, como siempre, que saque sus propias conclusiones. Si que incluyo un extracto del Editorial de El País.

En lugar de potenciar lo que une, el PP decidió poner sobre la mesa lo que separa. Con el Congreso disuelto, a 48 horas de las elecciones y con el cuerpo del ex concejal socialista todavía caliente, al representante popular, Ignacio Astarloa, al que hasta hace pocos meses muchos aún consideraban un hombre razonable, no se le ocurrió otra cosa mejor que reclamar la revocación de un texto que había sido aprobado por todos los grupos. El objetivo no era otro que erosionar al Gobierno y sembrar la duda sobre la honestidad del presidente Zapatero y su partido cuando afirma que ya no cabe ninguna opción de diálogo con ETA. La víctima de ayer era militante, precisamente, de ese partido. Falta saber, y los ciudadanos tienen el derecho a conocerlo antes de acudir mañana a las urnas, si Astarloa actuó por iniciativa propia o por órdenes de su jefe político, Mariano Rajoy. El presidente del PP no debería permitir que esta duda ominosa se alargue ni un minuto. No se trata de la política, es la dignidad personal lo que está en juego.