En este post voy a dejar a un lado mi habitual prosa poética, y voy a ir directamente al grano.

En España es obligatorio contar con un documento que acredite nuestra identidad. Tal documento es conocido por todos como: DNI.

Pues bien, resulta que la obtención y/o renovación de dicho documento no se lleva a cabo de forma gratuita, sino que el que lo solicite (esto es, todos los españoles, puesto que es obligatorio) debe abonar unas tasas que ascienden concretamente a 6´70.

Mi pregunta es: si la tenencia de dicho documento es obligatoria para todos los españoles, ¿por qué debemos ser los ciudadanos los que afrontemos ese gasto de forma directa?

¿Por qué no se sufraga con los fondos del Estado?

A este paso, el Gobierno va a llegar a tomar medidas tan absurdas como obligar a todos los ciudadanos  a llevar puesto el cinturón de seguridad, y a multar a todo aquél que incumpla esa norma.

No, no creo que lleguen a tanto.