Supongo que a estas alturas ya habréis oído que (tomándome la libertad de usar el término acuñado por Manuel Rico) El Señor NO ha decidido convocar a los españoles para hacer ver al gobierno su equivocación. Viendo las noticias en los medios y los comentarios de los lectores en aquellas que los permiten no es difícil aventurar que será una manifestación grande en comparación con las últimas convocadas, ya que parte de los votantes del PSOE no comulgan con lo que ha hecho el gobierno en este caso y el la inmensa mayoría de los votantes del PP sólo ven una oportunidad más de dejar claro que llevan casi 4 años permitiendo que otros se sienten en el trono que les pertenece por derecho divino y que les arrebataron mediante engaños y bombas.

Por mi parte ya se que no saldré a la calle el día que se convoque esta panmanifestación. Y no porque no sea español, cosa que podría deducirse según la teoría del PP de que todos los españoles piensan como ellos, están decepcionados y creen que el gobierno se ha vendido a las presiones etarras, sino por las siguientes razones:

1- a pesar de creer que la opción de haberle dejado como estaba habría sido más justa no ya para con las víctimas (que no creo que consiguan justicia con la muerte de este personaje y que creo que deberían dejar de ejercer de lo que no son) sino atendiendo sólo a los crímenes de este energúmeno, creo que la opción tomada por el gobierno es ciertamente un paso al vacío, un riesgo que han asumido en vistas a intentar una vez más acabar con el terrorismo en este país. La forma será criticable pero es indiscutiblemente legal y no es una decisión tomada en beneficio propio. Frente a las palabras de Acebes diciendo que si el PP retoma el poder (dios no lo quiera) dejaran a ETA como estaba, es decir, “cerca de la derrota final” el PSOE ha optado por una política arriesgada, pero la única al final que puede conducirnos (a mi entender) a un resultado definitivo.

2- No podría salir a reivindicar nada con un partido que en los últimos 4 años a desprestigiado para mi la política, que ha descalificado a las instituciones y puesto en duda sus decisiones cuando no le han convenido y que ha descalificado a la mayoría de los de los ciudadanos de este país, los cuales son tontos y manipulables.

En uno de mis últimos post hablaba de los documentales de la BBC sobre la política del miedo, política que al final no es otra que la que usa el PP que, pese a negarlo, sólo ha sido capaz en estos últimos años de hacer oposición en base a los atentados del 11M y la política antiterrorista-ETA. Lleva 3 años usando esta política del miedo. Esta y la de la deslegitimación del enemigo, entendiendo como enemigo no sólo al partido del gobierno sino a todos los españoles que, le pese al PP lo que le pese, le llevaron al poder para castigar la desfachatez que campaba a sus anchas en la útima época del periodo de Aznar.

Con todo esto no puedo sino lanzaros preocupado la pregunta: ¿a donde nos va a llevar esto?